Contar con sistemas de protección contra sobretensiones en telecomunicaciones es de gran importancia para asegurar la continuidad y fiabilidad de las operaciones. ¿Quieres saber cómo funcionan? En ISTEL te contamos sobre ellos y su relevancia como soluciones eficientes para estas infraestructuras.
Las infraestructuras de telecomunicaciones, esenciales para la conectividad global, dependen de sistemas eléctricos robustos y fiables para su funcionamiento ininterrumpido. Sin embargo, estas infraestructuras están expuestas a amenazas eléctricas, siendo las sobretensiones una de las más críticas.
La protección contra sobretensiones en telecomunicaciones implica el uso de dispositivos especializados que detectan y desvían picos de tensión antes de que estos afecten a los equipos sensibles. Estos dispositivos están diseñados para reaccionar en milisegundos, protegiendo redes y sistemas de transmisión de datos.
Por lo tanto, una protección contra sobretensiones adecuada garantiza la seguridad de los equipos, así como también la integridad de las comunicaciones.
¿Qué es una sobretensión y cuáles son sus causas?
Una sobretensión es un aumento repentino y temporal del voltaje en un sistema eléctrico, que puede durar desde milisegundos hasta varios segundos. Estas elevaciones de tensión pueden ser peligrosas para los equipos electrónicos, ya que pueden causar daños irreparables en los dispositivos si no se cuenta con una protección contra sobretensiones eficaz.
Las sobretensiones pueden tener diversas causas, algunas de las más comunes son:
- Rayos: Las descargas atmosféricas generan picos de tensión extremadamente altos cuando caen cerca de las líneas eléctricas o de telecomunicaciones, provocando sobretensiones que se propagan a través de los cables y dañan los equipos conectados si no existe una adecuada protección contra sobretensiones.
- Conmutaciones de maquinaria: Los arranques o paradas bruscas de grandes equipos industriales, como motores o generadores, pueden generar variaciones en el voltaje que desencadenan sobretensiones en las redes eléctricas y de telecomunicaciones cercanas.
- Interrupciones momentáneas en el suministro eléctrico: Cuando hay cortes de energía breves y repentinos, la energía que retorna tras la restauración puede hacerlo con un pico de voltaje superior al normal, causando una sobretensión.
- Fallos en la conexión o cortes del cable neutro: Un mal funcionamiento en el cable neutro, que es el encargado de estabilizar el sistema eléctrico, puede generar un desequilibrio en la distribución de la energía, resultando en sobretensiones que afectan a los equipos conectados.
- Maniobras y defectos en el suministro eléctrico: Operaciones de mantenimiento o fallos en la red eléctrica, como cambios de fase o cortocircuitos, pueden originar fluctuaciones repentinas de tensión que se traducen en sobretensiones perjudiciales para los sistemas electrónicos.
Las sobretensiones pueden ser provocadas por una serie de factores, tanto naturales como derivados de la infraestructura eléctrica, y sin una protección adecuada, representan un riesgo importante para las telecomunicaciones.
Tipos de sobretensiones: permanentes y transitorias
Las sobretensiones pueden clasificarse en dos tipos principales: permanentes y transitorias. Ambas pueden tener efectos negativos sobre los sistemas eléctricos y de telecomunicaciones, aunque su origen y características difieren.
Entender la naturaleza de cada una de estas sobretensiones es clave para implementar las medidas de protección adecuadas y garantizar la seguridad de los equipos y redes.
Sobretensiones permanentes
Las sobretensiones permanentes son aumentos de voltaje sostenidos en el tiempo, que pueden durar minutos, horas o incluso días. Generalmente, se producen por fallos estructurales en la red eléctrica, como un corte en el conductor neutro, un mal funcionamiento de los reguladores de tensión o problemas en la distribución de energía.
Este tipo de sobretensión puede causar daños graves en los equipos electrónicos si no se detecta y corrige rápidamente, ya que los dispositivos no están diseñados para soportar niveles de tensión superiores a los nominales durante largos periodos.
Sobretensiones transitorias
Las sobretensiones transitorias, también conocidas como picos de tensión, son aumentos de voltaje muy breves, típicamente de milisegundos de duración, pero con una intensidad considerable. Son causadas por eventos repentinos, como descargas atmosféricas (rayos), conmutaciones de alta potencia o maniobras en la red eléctrica.
Aunque de corta duración, estas sobretensiones pueden causar daños irreparables en equipos sensibles, como los utilizados en telecomunicaciones, lo que hace imprescindible la protección adecuada mediante dispositivos como los protectores contra sobretensiones transitorias (SPDs).
Protección contra sobretensiones ¿Por qué son necesarias en infraestructuras de telecomunicaciones?
Las infraestructuras de telecomunicaciones son especialmente vulnerables a las sobretensiones debido a la gran cantidad de equipos electrónicos sensibles que utilizan. Desde servidores y routers hasta antenas de transmisión, todos estos dispositivos están diseñados para operar dentro de un rango específico de voltaje.
Una sobretensión puede dañar los componentes internos de estos equipos, generando interrupciones en los servicios de comunicación, pérdida de datos o incluso la destrucción total de los dispositivos.
¿Cómo funcionan las protecciones contra sobretensiones en infraestructuras de telecomunicaciones?

Los sistemas de protección contra sobretensiones en infraestructuras de telecomunicaciones funcionan mediante la instalación de dispositivos especializados, como los protectores contra sobretensiones transitorias (SPDs), que actúan desviando los picos de tensión a tierra antes de que puedan alcanzar los equipos.
Estos dispositivos de protección contra sobretensiones están diseñados para reaccionar en milisegundos, protegiendo los componentes sensibles de la infraestructura de telecomunicaciones ante picos repentinos de voltaje. Deben estar instalados en puntos estratégicos de la red, como en los cables de alimentación, las líneas de datos y las conexiones, para brindar una protección completa.
Los sistemas de protección también pueden incluir tecnologías de monitoreo que alertan a los operadores cuando se ha producido una sobretensión, permitiendo una respuesta inmediata. En el caso de las sobretensiones permanentes, los dispositivos pueden detectar la elevación sostenida del voltaje y cortar el suministro eléctrico para evitar daños mayores.
Protección contra sobretensiones en infraestructuras de telecomunicaciones ¡Encuéntralas en ISTEL!
La protección contra sobretensiones es un aspecto crítico para garantizar la integridad y el funcionamiento continuo de las infraestructuras de telecomunicaciones. Dado el creciente uso de tecnologías avanzadas y la dependencia de los sistemas de comunicación, invertir en soluciones efectivas de protección es primordial.
Si deseas profundizar en este tema y conocer todos los detalles sobre cómo los cuadros eléctricos inteligentes protegen infraestructuras críticas, te invitamos a leer nuestro artículo completo: La importancia de los cuadros eléctricos inteligentes en la protección de infraestructuras críticas.
Optar por sistemas de protección contra sobretensiones que ofrecen rendimiento y respuestas rápidas, es decisivo. Por ello, en ISTEL aseguramos que las comunicaciones se mantengan seguras y operativas con nuestros dispositivos diseñados especialmente para cuidar de las infraestructuras de telecomunicaciones. ¡Contáctanos y compruébalo ahora!